lunes, 21 de mayo de 2007
El camino a la madurez
Cuando era pequeña todos me miraban, y decían que tenía más edad, que hablaba como grande, que era muy inteligente, o sencillamente, que era más madura que los niños de mi edad. Con el tiempo, eso ha ido cambiando, y esos comentarios ya no se dan, por el contrario, a primera vista me ven como si tuviera varios años menos... ¿Qué fue lo que cambió? ¿Es que realmente no cambió nada en mí?...

Debo reconocer que no creo que eso...

Cuando era niña, tenía prisa por crecer, quería usar zapatos de tacón todo el tiempo, y maquillarme, y usar minifaldas igual que las lolas de la tele. Aprendí a leer a los tres años, porque tenía sólo hermanos mayores y todos ellos hacían tareas; aprendí a hablar como grande, porque sólo así me entendían; aprendí más palabras que el resto, porque leía mucho; aprendí a ser ordenada, porque nadie en mi casa hacía desorden; aprendí a comer en la mesa con los grandes, porque no habían más niños; aprendí a mantener una conversación seria, porque nadie quería oir sobre mis dibujos animados favoritos... aprendí a ser un adulto antes de aprender a ser una niña.

Cuando crecí de porte conocí a personas que irradiaban algo diferente a lo que yo conocía, no eran seres perfectos, muy por el contrario, eran muy simples. Y no había nadie como yo, eso me hizo sentir importante, pero también sola, cada vez más sola, y empecé a querer esa simpleza... Me hice simple en la forma, para que el resto me aceptara, pero sigo siendo la misma en el fondo, aunque algunas cosas han cambiado. Si bien ya no soy perfecta, sigo conservando la razón. Si bien no soy tan simple como el resto, aprendí a sentir y disfrutar... Me veo pequeña cuando me miro al espejo, pero cuando pienso en mí, me siento grande... creo que en el fondo he madurado cuando todos creen lo contrario. Crecí, pero pocos se dieron cuenta...

Supongo que tomé un camino diferente, pero logré el mismo objetivo, y es que el objetivo de la madurez no es ser más "adulto", más vividor, o más responsable. La madurez consiste en poder adaptarse al medio, y sobrevivir en él... y aunque a veces me cuesta, creo que al final siempre lo consigo...

posted by Kumori @ 9:31 p. m.   1 comments
domingo, 20 de mayo de 2007
Disfrutar de la Simpleza


Van casi tres meses desde la última vez que escribí en este blog, y no porque no quisiera, sino porque estaba disfrutando a concho la etapa que comencé a enfrentar. Vivir parte de tu vida en un lugar donde todos te dan una sonrisa, un lugar donde puedas respirar paz, donde puedas entregar todo lo que tienes... comencé a disfrutar de las cosas sencillas, me siento en cierta forma unida a ellas... y ya pronto las tendré que dejar, hasta que las encuentre otra vez en mi camino.

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Cuando nos enfrentamos a cosas nuevas, en un comienzo nos invade el temor, pero luego, cuando llegamos a conocer estas cosas, comenzamos a disfrutar... y ¿Qué es lo que más disfrutamos en verdad? ¿El sabor del chocolate que nos regaló una abuelita con la que conversamos a veces, o el que se haya acordado de uno?... Un niño sabría la respuesta...

Un niño es capaz de no pensar en lo que se hace mal, sino ver lo que se hizo bien. Un niño es capaz de ver la belleza en un monstruo. Es capaz de sentir compasión por el que le ha hecho mal... Se queda admirado del mundo que lo rodea, puede pasar horas observando las hojas de un árbol mecerse con el viento... Y así mismo es capaz de reir con un perrito que se persigue la cola, de sonreir con el vuelo de un pájaro, de quererte, sin saber tu nombre... Si todos fuéramos como niños... si sólo esa simpleza de espíritu habitara en todos y cada uno... entonces seríamos felices, siempre sonrientes, disfrutando de las cosas pequeñas...
posted by Kumori @ 10:16 p. m.   0 comments
AMANECIENDO ENTRE NUBES
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Nombre: Kumori
Ubicación: Chile

Desperté como si hubiera dormido mil años, flotando en las nubes de sólo recordar tu beso... el beso de un niño... Y entonces construí una fortaleza para resguardar nuestros sueños...

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